'Anna Karenina' viste moda española
- Modistos españoles crean modelos inspirados en célebres obras literarias
- Veinte trajes para Rusia se exhibe en el Museo de Artes Decorativas de Moscú
- La muestra une moda y literatura con motivo del año Dual España- Rusia
Diseñadores que dialogan con la literatura
Ailanto / Cinco horas con Mario / Miguel Delibes
Agatha Ruíz de la Prada / La fiesta del chivo / Mario Vargas Llosa
Amaya Arzuaga / Delirio y destino / María Zambrano
Ana Locking / Ella, los pájaros. Esa polilla que delante de mí revolotea / Olvido García Valdés
Angel Schlesser / Historias de San Petesburgo. La avenida Nevski / Nicolás Gógol
Custo Barcelona / La plaza del Diamante / Mercé Rodoreda
Davidelfín / Exentos II / Antonio Gamoneda
Devota & Lomba / Cien años de soledad / Gabriel García Marquez
Duyos / Anna Karénina / León Tolstói
Hannibal Laguna / Latitud / José Angel Valente
Jesús del Pozo / Los años con Laura Díaz/ Carlos Fuentes
Juanjo Oliva / Musa. Otros poemas. El canto y la ceniza / Marina Tsvetáieva
Lemoniez / Cuentos / Antón Chejov
Loewe / Don Quijote de la Mancha / Miguel de Cervantes
Lydia Delgado / Barrio de Maravillas / Rosa Chacel
Miguel Palacio / La Reina de las Nieves / Carmen Martín Gaite
Miriam Ocariz / Olvidado Rey Gudú / Ana María Matute
Roberto Torretta / Carlota Fainberg / Antonio Muñoz Molina
Roberto Verino / La mujer de Lot / Anna Ajmátova
Victorio & Lucchino / Soles / Juan Gelman
"Todas las familias felices se parecen unas a otras; pero cada familia infeliz tiene un motivo especial para sentirse desgraciada. En casa de los Oblonsky andaba todo trastrocado. La esposa acababa de enterarse de que su marido mantenía relaciones con la institutriz francesa y se había apresurado a declararle que no podía seguir viviendo con él. …."
Así comienza Anna Karenina. El drama de León Tolstoi es una de las obras claves de la literatura universal. ¿Pero cómo vestiría Karenina, mujer fuerte e independiente, en pleno siglo XXI?.
Esta es la pregunta a la que tuvo que enfrentarse el diseñador Juan Duyos. Al final, el modisto optó por crear para la heroína rusa un traje transparente como un "canto a la sensualidad ", pero con un cuello apretado que simboliza "el ahogo existencial por las convenciones de la época".
Son numerosas las mujeres de "rompe y rasga" que pueblan novelas y versos. Muchos diseñadores soñarían con vestir a ilustres modelos imaginarios como la poderosa Urania de la Fiesta del Chivo, de Mario Vargas Llosa, o a la mujer melancólica del poema Ella a los pájaros de la escritora Olvido García Valdés (Premio Nacional de Poesía 2007).
Anna Karenina es un canto a la sensualidad
La modista Ana Locking, famosa por sus diseños geométricos, fue la elegida para "poner percha a la tristeza" de los poemas de Valdés. "Al final optó por un traje de chaqueta rojo muy impactante. La mitad estaba roto y la otra mitad entero.(Ver fotogalería). Simboliza el sufrimiento de la vida, pero también la recomposición de esta mujer de los versos", cuenta Concha Hernández, comisaria e ideóloga de Veinte trajes para Rusia, diseñadores que dialogan con la literatura.
"¡Lo veo, lo veo¡"
Los 20 diseñadores españoles se han inspirado en fragmentos de obras de la literatura universal, El Quijote (centrado en la figura de Dulcinea), u Olvidado Rey Gurú de Ana María Matute, entre otros.
Los creadores de moda han tenido que enfrentarse al reto de "vestir la literatura", con sus párrafos, sus escenas y sus personajes, en esta ocasión femeninos.
Han diseñado trajes exclusivos desde su particular visión personal. Las referencias a veces caminan un paso más allá, y rozan el simbolismo. Es el caso del diseño de Devota y Lomba para Cien años de soledad.
El color amarillo es un tributo a Gabriel García Márquez
Un traje amarillo, porque la novela menciona mariposas amarillas, porque este color representa la alegría en Colombia, y por la fijación cromática del Nobel, Gabriel García Márquez, que escribe flanqueado por un jarrón con dos rosas amarillas. Explosión gualda, en definitiva.
La simbiosis de autores-obras y modistos fue tal que en el caso de Davidelfín acabó absorbido por las poesías de Antonio Gamoneda. Más impactante es el caso de la última Premio Cervantes, Ana María Matute, que exclamó: ¡Lo veo, lo veo¡, al contemplar la creación de Miriam Ocariz inspirada en su libro Olvidado Rey Gudú .
Vestir la poesía
Este singular ejercicio, dónde literatura y moda se dan la mano puede contemplarse (hasta el 10 de mayo), en el Museo Ruso de Artes Decorativas de Moscú, con motivo del año dual Rusia-España.
Una exposición, que también hace un guiño a las letras rusas, (se incluyen fragmentos de Tolstoi, Chéjov, Ajmátova, Tsvetqaieva o Gogol, y Rusia es uno de los países con los índices de lectura más altos), y que ya ha viajado por Tokio, Pekín, Estambul, Milán, Bruselas y Budapest.
Davidelfín acabó absorbido por las poesías de Antonio Gamoneda
La muestra itinerante, organizada por el Instituto Español de Comercio Exterior, el Instituto Cervantes y la Asociación de Creadores de Moda, como las propias tendencias, se va transformando y creciendo a través del tiempo, con la incorporación de nuevos autores y diseñadores.
"Para los escritores, recurrir a la descripción del atuendo de sus personajes siempre ha sido una manera de situar al lector, y la acción en un momento determinado", asegura la comisaria sobre el tandem moda-literatura.
Decía el poeta Mallarmé que la moda es la diosa de las apariencias. Apariencias que a veces esconden el lirismo de la poesía.
CONSULTEN, OPINEN , ESCRIBAN .
Saludos
Rodrigo González Fernández
Diplomado en "Responsabilidad Social Empresarial" de la ONU
Diplomado en "Gestión del Conocimiento" de la ONU
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