| Soledad Bacarreza:
"Hay excusas bastantes penosas (para los resultados en los JJ.OO.)" Esta comentarista deportiva hace un descarnado juicio a la participación chilena en los últimos Juegos Olímpicos, cree que hubo errores y excusas penosas e inaceptables. En el plano personal, dice no haber pagado costos familiares. Miércoles 3 de Septiembre de 2008
María José Errázuriz L.
Fotos, Claudio Vera. Está aún sufriendo los efectos del 'jet lag', esa descompensación física que se produce por el cambio de los husos horarios cuando se viaja al Asia. Se despierta, dice, a las 2 de la mañana con hambre.
Soledad Bacarreza está cansada, tras un mes en Beijing para cubrir las informaciones en torno a los Juegos Olímpicos, y sólo espera que llegue fin de mes para tomar unos días de descanso.
Pero más allá de eso, esta comentarista deportiva, ex atleta y psicóloga, está satisfecha por la labor desarrollada y con razón, debido a que su trabajo destacó por ser informado y preciso a la hora de hablar de tantas disciplinas que tienen más de un secreto.
Asertiva en el juicio, gracias sus conocimientos, cree que el futuro del deporte mundial traerá más sorpresas y nuevos récords, más cuando el dopaje se ha instalado entre los atletas y es muy difícil de pesquisar.
-¿Supongo que tienes sentimientos contradictorios con Beijing? Haber asistido a unos JJ.OO. donde se batieron marcas mundiales al por mayor, mientras nuestra participación fue paupérrima.
"Dan un poco de envidia las naciones que tienen una representación en el medallero mucho más importante que la nuestra; pero da un orgullo tremendo que un chileno, en medio de este panorama paupérrimo como lo llamas, destaque. Ahora, no hay ninguna sorpresa de por medio, nosotros sabíamos que esta era una generación que, salvo honradas excepciones, se estiró gracias al plan ADO; es una generación donde hay deportistas como Paris Inostroza y Soraya Jadue que son, ya, veteranos, entre comillas y que están en su último ciclo. Obviamente, siendo una generación más bien añosa en cuanto a lo que se da en participación en estos torneos, no es mucho lo que se puede esperar. Pasó lo mismo en los Panamericanos de Río.
"Hay más desilusión en la dirigencia que no ve resultado el ADO, en un año en que hubo más plata para el deporte y eso no se vio reflejado en los resultados. Eso me da un poco de envidia, me dio envidia ver como los chinos ganaban cuanta medalla se les cruzaba por delante y a nosotros nos cuesta un mundo y esa medalla, además, la entrega un profesional, lo cual da luces de cual es el camino a seguir, obvio". | Historial | | Si quieres ver entrevistas anteriores, linkea Mujeres top, arriba de esta página. |
-¿Y no se supone que los JJ.OO. eran para amateurs?
"Hace mucho tiempo que eso no es así y todos los que ganan medallas en los JJ.OO. son profesionales, son todos deportistas pagados por sus clubes, que tienen trato de profesional. No es con todos los deportes, no hay profesionalismo, si tú quieres, en levantamiento de pesas, pero si lo hay en cuanto al entrenamiento, a las giras que se hacen.
"Tal vez la remuneración económica para ese tipo de deportes no son las mismas que para los tenistas o nadadores como Phelps, pero el tipo de apoyo que recibe un deportista de medalla es el mismo que un profesional y eso es lo que nos falta a nosotros".
-¿Entre nuestros deportistas hubo muchas excusas?
"Creo que hubo equivocaciones de parte de nuestros deportistas, de haber ido a unos JJ.OO. en donde se sabía que el nivel iba a ser absolutamente superior, donde no están claros cuáles son tus objetivos; o si los tenías claro, son totalmente errados en cuanto a lo que significa una competencia deportiva. O sea, lo que hizo Patricio Almonacid, de mostrar la camiseta a mí, francamente, no me parece. Se puede mostrar la camiseta en otras instancias, pero no en los JJ.OO. donde tienes que competir y entregar lo mejor que tú tienes. Haberse escapado, sabiendo que te vas a reventar y no lograras llegar a la meta, no me parece.
Tampoco me parece escuchar a deportistas que vienen a disfrutar, porque nadie que gane una medalla de oro olímpica disfruta antes, lo hace después. El estrés y la tensión de la competencia olímpica existe y es parte del cuento".
-Algunos dicen que fueron a ganar experiencia…
"Eso, por último, me parece más válido, pero no me parece válido que porque corres medio segundo arriba de tu marca, vayas y le mientas a los periodistas, como lo hizo Cristián Reyes, quien dijo que había hecho tres veces la marca mínima cuando sabes que el archivo no miente. Esas excusas, me parecen bastante penosas, y no da lugar de parte de algunos deportistas".
-Todo esto va más allá de lo económico. ¿Hay falta de profesionalismo en el espíritu y formación del deportista? Dio la impresión que no todos se lo toman en serio.
"Sí, no todos, pero hay algunos que se lo tomaron muy en serio como la Bárbara Riveros, Pablo McCandless, Fernando González o Natalia Duco que llegó pasada en su máximo rendimiento que estaba dado para el Mundial de Polonia. Me gustó también Oscar Vásquez que tiene 21 años y mejoró mucho su rendimiento.
"Uno no puede meterse en la mente de los deportistas; creo que cada uno tiene que hacerse un autoexamen y ver a qué fue a los JJ.OO. y cuánto fue lo que rindió. Ahora nosotros tenemos una desventajas frente al resto, porque para poder hacer las marcas mínimas tienes que estar en tu ciento por ciento de rendimiento para la fecha de clasificación y por eso, se lleva pasados".
-¿No se deberían pedir antes?
"Sí, pero en el atletismo sirven las marcas sólo de un año atrás. En países desarrollados como Estados Unidos se hacen campeonatos selectivos porque tienen a muchos que hacen la marca. Aún así, creo que hay un autoexamen que deben hacerse los deportistas chilenos; yo no sé si la mentalidad de ellos sea profesional o no, pero sí creo que hubo posturas erradas respecto a los JJ.OO. que se sabían que iban a romper marcas. O vas a competir a los juegos con todas la de la ley o mejor te quedas en casa".
-La primera reacción fue no más plata a la elite, sí al deporte masivo. Ahora se habla de priorizar los deportes de combate.
"No sé qué criterios están usando, ¿son acaso los deportes que nos han dado mejores resultados? En natación tenemos Kristel Köbrich y es finalista en un mundial, es una buena deportista. Sí, hay qué definir qué es lo que queremos, ¿medallas panamericanas u olímpicas? ¿Queremos medallas o una población que haga masivamente deporte? Para eso se necesitan modelos. Claro, lo que entregamos en los JJ.OO. no fue de lo mejor, lo acepto, pero cuando veo a González subirse al podio, pucha que da orgullo y, probablemente, muchos querrán imitarlo. Ahora, no han salido buenos tenistas y habrá que revisar por qué después de Ríos y González no ha ocurrido".
-¿Somos demasiados autoflagelantes? Porque, finalmente, a Bolivia, Perú, Colombia, Ecuador, tampoco les va tan bien. Hasta Venezuela y Cuba, con todo lo que invierten.
"Una medalla es poco, con eso estamos de la mitad para abajo…"
-Cayéndonos de la tabla…
"No, tampoco, porque hay muchos países chicos, islas que no se han escuchado nombrar, que participan con bandera".
-Sí, pero ese no debiera ser nuestro referente.
"No, evidentemente no; si dicen que vamos a ser un país desarrollado no debieran ser nuestro referente, pero primero, se necesita una cultura deportiva. Más allá de si somos autoflagenlantes o no, en este país no hay cultura deportiva, entonces, tampoco es tanto más lo que podemos esperar".
-Regresando a los JJ.OO., ¿sentimientos encontrados haber visto toda esa inversión en un país sin libertades…?
"Partamos de la base de que son mil 700 millones de chinos en forma extraoficial; oficial son mil 300, pero llama mucho la atención cómo puedes manejar un país así con un Presidente, ¿cómo no está dividido en estados? Sí, el contraste era feroz. Fuimos a caminar con Iván Valenzuela, el último día, para conocer Beijing, por los hutongs, esos callejones no pavimentados, y la pobreza era… daba escalofríos. Ver el contraste; uno sabe que existe la pobreza y la ha visto, pero estar primero en el Nido de Pájaros o el Cubo de Agua y después ver a los niños a patapeladas da harta tristeza.
"Uno se cuestiona cuál fue el objetivo último de haber pedido una sede para los JJ.OO.; mostrar una cara nueva al mundo, convertirte en potencia mundial, abrirse al resto de las naciones, equipararse con ellas, por ahí van los objetivos de estos JJ.OO.".
Lo anterior mantiene aún, hasta ahora, pensativa a Soledad Bacarreza. "Los chinos son encantadores, pero uno llega a preguntarse si les enseñaron a ser así o es natural; uno entra a cuestionarse todo, entonces, al final decía ya, esta amabilidad me tiene media tostada. Eran súper serviciales".
Y continúa: "En China nadie roba, te devuelven las cosas pérdidas; a Iván se le quedó el PC y su traje en el bus y se lo devolvieron, pero ¿por qué nadie roba? Porque si lo haces te fusilan tras un juicio que dura 2 horas. Entonces, dónde están los derechos humanos, por robar una moneda, una cartera o un perro la pena es la misma".
-En lo deportivo, ¿la tecnología le está cambiando el sentido a los JJ.OO.? Supuestamente esto era para que se midieran los hombres y hoy juegan tantos factores anexos.
"Sigue siendo una competencia de hombres con ayuda, en cierto sentido. Si se baten tantos récords en la piscina, obviamente, ella tiene que ver algo o los trajes Speedo. Acepto cualquier ayuda como que la piscina sea un metro más profunda, que controle el oleaje o tenga 10 pistas en vez de 8, pero lo que no acepto es el dopaje".
-Tú dijiste que era mucho, pero no se informaron más de 10 casos.
"Sí, hay que considerar que dentro de las sustancias prohibidas hay una serie de bloqueadores y otros que no se pueden descubrir; hay experimentos con células madres que tampoco están en la lista porque no están probados. Hay un montón de cosas que desconocemos, que manejan los grandes laboratorios… y obviamente no se dio positivo".
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